Un hombre ha sido condenado a 6 meses de prisión y a pagar 2.320 euros de indemnización por maltrato animal, tras propinar dos patadas mortales a un cachorro de 5 meses en una propiedad en Navarra. El juez considera que la reacción del acusado fue desproporcionada, ya que el perro no era agresivo ni representaba un peligro para nadie.
Los hechos tuvieron lugar en octubre del año pasado, cuando el cachorro, de raza Border Collie, se encontraba suelto en el terreno del acusado. A pesar de que el perro no mostraba agresividad ni causaba daños, el hombre le propinó dos patadas en el costado, provocando una hernia abdominal que finalmente resultó en su muerte.
El juez ha remitido los hechos a la Policía Foral para que se abra un expediente contra el propietario del perro por permitir que este entrara en una propiedad privada. Tanto la fiscalía como la acusación particular discreparon sobre la calificación de los hechos, pero el juez considera que la reacción del acusado fue desproporcionada y que no existía intención de maltrato.
El magistrado destaca que el cachorro no representaba un peligro real, ya que en ocasiones anteriores había sido expulsado de la propiedad por métodos menos lesivos. A pesar de la argumentación de la defensa, el juez considera que la reacción del acusado fue excesiva y no justificada.
En un contexto donde los ataques de perros sueltos causan miles de muertes al año, el juez enfatiza la importancia de erradicar este tipo de riesgos, pero insiste en que en este caso particular, la reacción del acusado fue desmedida.
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