Un hombre ha sido condenado a 12 años y 9 meses de prisión por maltratar y violar a su esposa en dos ocasiones en Pamplona. La mujer fue controlada en extremo por su marido, quien la tenía localizada por GPS, le controlaba el dinero y le impedía tener amistades o salir de casa sin su acompañamiento.

La víctima renunció a cualquier indemnización y el agresor no podrá acercarse a menos de 300 metros de ella durante casi 18 años. La pareja, de nacionalidad peruana, estaba casada desde 2015 y tenían tres hijas juntas, dos nacidas en Perú y la menor en España.

El hombre obligaba a su esposa a mostrarle la casa por videollamada, incluso debajo de las camas, para buscar posibles hombres allí. También le exigía enviar fotos de sus actividades diarias e incluso de sus partes íntimas para confirmar que no tenía relaciones con otros.

Una vez en Navarra, el agresor insultaba y menospreciaba a su esposa, además de controlar todos sus movimientos y amistades. La dominación se extendía al ámbito sexual, donde la obligaba a mantener relaciones alegando que era su deber por haberla llevado a España.

En el juicio, la fiscalía pidió 23 años y 10 meses de prisión, mientras que la defensa solicitó la absolución. La sentencia final impone al agresor 6 años de prisión por cada violación, 1 año por maltrato habitual y 9 meses por maltrato no habitual.

El tribunal considera que la víctima no consintió las prácticas sexuales, sino que fue forzada por la violencia ejercida por su marido. Se estima la atenuante de dilaciones indebidas, ya que el proceso se prolongó durante 5 años desde que se presentó la denuncia.