En un giro sorprendente de los acontecimientos, la Policía Nacional ha arrestado a un individuo sospechoso de haber perpetrado un robo violento en un supermercado ubicado en el Ensanche de Pamplona. Curiosamente, el hombre regresó al lugar del crimen minutos después de llevar a cabo el acto delictivo, olvidando su mochila en el establecimiento durante su fuga.

Según la información proporcionada por las autoridades, el sospechoso llegó al supermercado y dejó su mochila en la entrada, ya que al pasar por el arco de seguridad, la alarma sonó. Este tipo de incidentes ocurre con frecuencia, y por ello, una de las empleadas le pidió que la dejara cerca de las cajas registradoras; él accedió a la solicitud. Sin embargo, su comportamiento en el interior del local fue inusual, ya que pasó más de media hora vagando sin un rumbo claro.

La trabajadora, inquieta por la actitud del hombre, decidió revisar las imágenes de las cámaras de seguridad, momento en el cual advirtió cómo el individuo ocultaba varios productos entre su ropa. Cuando el hombre intentó salir del supermercado sin pagar, la empleada, que había sido testigo de su comportamiento sospechoso, se interpuso en su camino para exigirle que abonara lo que había intentado robar. En respuesta, él reaccionó de manera agresiva, lanzándole insultos y utilizando la fuerza para empujarla y así lograr su huida.

Inmediatamente después del incidente, la empleada solicitó la intervención de la Policía Nacional, quienes se presentaron rápidamente en el lugar. Tras realizar algunas preguntas a la trabajadora, una patrulla comenzó a buscar al hombre en las cercanías del supermercado.

En un giro irónico, poco tiempo después, la sala CIMAC de la Policía Nacional recibió una llamada desde el mismo supermercado, informando que el presunto ladrón había regresado para recuperar la mochila que había olvidado tras el altercado. Afortunadamente, una patrulla del GAC de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana estaba en las proximidades, lo que permitió una rápida intervención y la posterior detención del individuo.

Desde la Policía Nacional se ha señalado que “un hecho que podría parecer un simple hurto es capaz de convertirse en un delito mucho más grave, como lo es un robo con violencia, cuando se emplea la fuerza para escapar”. Este suceso resalta la importancia de la seguridad en los comercios y cómo un simple error o un momento de oportunidad puede llevar a una escalada en la gravedad de los delitos.