En un juicio rápido, el autor de los delitos ha reconocido los hechos y asumió su responsabilidad. Esto se dio en el marco de una investigación realizada por agentes de la Policía Foral, específicamente del Grupo de Delitos Informáticos de la División de Policía Judicial, en la comarca de Pamplona.

Según informaciones proporcionadas por el cuerpo policial, los delitos investigados incluyen coacciones y violación a la integridad moral. Estos se llevaron a cabo a través de la difusión de imágenes generadas mediante aplicaciones de Inteligencia Artificial (IA) de unas compañeras de instituto desnudas.

El caso fue descubierto luego de que una joven denunciara en la comisaría de Policía Foral de Pamplona que una amiga había recibido una imagen de ella, editada para aparecer desnuda. Más tarde, la denunciante informó que estaba recibiendo constantemente mensajes denigrantes y vejatorios de carácter sexual, acompañados de imágenes falsas en las que se mostraba desnuda. El autor obtenía estas imágenes a partir del perfil de la joven en una red social y las editaba para luego difundirlas.

Más adelante, otra joven, conocida de la anterior, también acudió a la policía al enterarse de que una imagen falsa suya, donde parecía estar desnuda, había sido enviada a la primera denunciante. Esto levantó sospechas en los investigadores por el realismo de las imágenes generadas, que incluían el rostro de la víctima y el entorno en el que habían sido tomadas, siendo prácticamente idénticas a la fotografía original, solo que mostrando un cuerpo desnudo falso. Solo la propia víctima y su círculo cercano podían notar la falsedad de las imágenes.

Después de poner todos los hechos en conocimiento de la Autoridad Judicial, el Juzgado de Instrucción Nº 4 de Pamplona se hizo cargo de la investigación y autorizó a los agentes de la Policía Foral para llevar a cabo las pesquisas necesarias para identificar al autor. Una vez finalizadas las investigaciones, se llevó a cabo un juicio rápido en presencia del investigado y todas las partes involucradas, donde el acusado admitió su culpabilidad en los hechos imputados.