En una reciente operación en la capital navarra, la Policía Foral ha llevado a cabo la detención de cuatro hombres acusados de un delito grave relacionado con el tráfico de sustancias controladas. Esta acción se enmarca dentro de una estrategia más amplia para combatir el crimen organizado en la región.

Los hechos ocurrieron en el parking de los corralillos del gas, donde una patrulla encubierta de seguridad ciudadana estaba realizando labores de vigilancia en respuesta a una serie de robos en vehículos que habían tenido lugar en los últimos días. Fue en este contexto que los agentes observaron a un grupo de cinco personas, uno de ellos un menor, cuyas actividades generaron sospechas entre los oficiales, especialmente al identificar a un conocido con un historial delictivo considerable en la zona del casco viejo de Pamplona.

Ante la inquietud suscitada por la presencia de esta agrupación, se solicitó la asistencia de unidades caninas para llevar a cabo un registro más exhaustivo del vehículo alquilado que usaban. El resultado fue contundente: se encontraron 25 placas de hachís, cada una pesando 100 gramos, sumando en total 2,5 kilogramos de droga, lo que refleja la seriedad del caso.

Los detenidos fueron trasladados a la comisaría para aclarar los pormenores de la operación y determinar los planes que tenían para la droga. Las investigaciones apuntan a que el grupo había viajado desde Málaga y se presume que utilizaban vehículos adicionales, como un coche "lanzadera", para alertar sobre la posible presencia de las fuerzas de seguridad.