Las infraestructuras ferroviarias españolas enfrentan una interrupción significativa en su operación cuando las obras programadas se lleven a cabo los días 10 y 11 de mayo, afectando a los trayectos de Media y Larga Distancia en el tramo que conecta Zuasti y Uharte-Arakil.

Según ha informado Adif, estas labores son necesarias para reparar los daños ocasionados por el desbordamiento del río Arakil que tuvo lugar en septiembre de 2024. La intervención abarcará más de 2 kilómetros de vía, donde se llevará a cabo la renovación del balasto y se implementarán mejoras en los sistemas de drenaje y el sostenimiento de los taludes circundantes. Esta renovación no solo restaurará el servicio, sino que también eliminará las restricciones actuales de velocidad, facilitando un viaje más seguro y eficiente, ha anunciado Renfe.

Para minimizar el impacto en los viajeros, Renfe ha ideado un plan de transporte alternativo que incluirá un total de 35 autobuses para cubrir los trayectos afectados durante los días de obra. De estos, 23 autobuses atenderán las necesidades de los pasajeros de Media Distancia, mientras que 12 se dedicarán a los servicios de Larga Distancia.

En concreto, los usuarios de trenes de Media Distancia deberán utilizar el autobús para trasladarse entre Pamplona y Uharte-Arakil. Además, los itinerarios de Larga Distancia que conectan Barcelona con Vigo y A Coruña con Salamanca serán redirigidos a través de Logroño para asegurar la continuidad del servicio.

Asimismo, quienes viajen en tren entre San Sebastián y Barcelona verán modificados sus planes, ya que deberán realizar el trayecto entre San Sebastián y Pamplona por carretera los días de las actividades de mantenimiento. Esto también afectará a los trenes programados del 9 y 12 de mayo, cuando los servicios de transporte entre estas dos ciudades tendrán que adaptarse a estas nuevas directrices.