En una operación conjunta entre la Policía Nacional y la policía belga, se ha logrado desmantelar una red dedicada a la trata de seres humanos que capturaba a mujeres en España para ser explotadas sexualmente en Bélgica. Cuatro víctimas de origen latinoamericano han sido liberadas en el país europeo como resultado de esta intervención.

La acción policial ha culminado con la detención de siete personas, una de ellas en suelo español, y con registros domiciliarios en distintas ciudades como Madrid, Jerez de la Frontera, Murcia, Valencia, Barakaldo y Tudela. Según el comunicado emitido por la Policía Nacional, estas detenciones son resultado de una laboriosa investigación.

Todo comenzó en abril del año pasado, cuando la policía belga acudió a un domicilio tras recibir informes de una discusión entre dos mujeres, quienes revelaron que estaban siendo explotadas sexualmente. La colaboración entre las autoridades belgas y españolas permitió desentrañar una red que operaba entre ambos países con propósitos explotadores.

Esta organización criminal estaba perfectamente estructurada, con miembros distribuidos estratégicamente en distintas localidades de España y Bélgica. Los captadores y controladores operaban en Bélgica, mientras que en España se encargaban de la promoción y recepción de solicitudes de servicios sexuales, además del blanqueo de capitales obtenidos ilegalmente.

La investigación reveló la incautación de 19.000 euros en efectivo a una de las detenidas en uno de los viajes entre ambos países, así como la recopilación de abundante documentación relacionada con la red criminal. Tras identificar y ubicar a todos los implicados, se procedió al arresto de siete personas, logrando la desarticulación total de la organización y la liberación de las cuatro víctimas de explotación sexual en Bélgica.