PAMPLONA, 12 de agosto. La lucha por el bienestar animal ha tomado un nuevo impulso en Navarra tras la reciente intervención de la Guardia Civil, que ha puesto bajo la lupa a un vecino de Azagra por su posible implicación en un grave caso de abandono de un animal.

Los acontecimientos se desarrollaron a finales de junio, cuando la atención de los servicios municipales de Funes fue atraída hacia una galga que deambulaba en condiciones alarmantes en Peralta. El estado de salud del can era crítico; presentaba un grado severo de desnutrición y heridas en su piel, resultado de la exposición constante de sus huesos debido a la inanición.

La situación del animal, posteriormente llamado 'Polémica', motivó una rápida respuesta por parte del personal municipal, quien, al tomarla bajo su cuidado, se dedicó a brindarle atención veterinaria y un régimen alimenticio adecuado para su recuperación.

Una vez que la perra comenzó a mostrar signos de estabilidad, se procedió a verificar su microchip, lo que permitió identificar a su propietario. Sin embargo, este individuo no se había comunicado previamente con las autoridades sobre la desaparición de Polémica, afirmando que había perdido al animal tan solo cuatro días antes de su rescate.

Ante la gravedad de los hechos, se han iniciado diligencias que ya han sido remitidas a los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Tafalla. Este caso resalta la importancia de la responsabilidad que conlleva la tenencia de mascotas y cómo su abandono puede tener consecuencias legales.

Por ahora, la galga continúa en proceso de recuperación, bajo el cuidado de las instalaciones municipales de Funes, esperando un desenlace que no solo favorezca su bienestar, sino que también envíe un mensaje claro sobre la protección de los derechos de los animales en la región.