Sindicatos alertan sobre la preocupante prevalencia de accidentes laborales en Navarra, destacando su elevado índice en accidentes viales.
Según los sindicatos LAB, CGT, Steilas, ESK, EHNE e Hiru, en Navarra se han registrado cuatro fallecimientos de trabajadores en accidentes laborales entre el 10 y el 17 de enero, tres de los cuales ocurrieron en carretera. Estos sindicatos han advertido que la comunidad autónoma es líder en accidentes de trabajo y han instado al Gobierno foral a que tome medidas urgentes para reducir el alto número de desplazamientos laborales.
En una rueda de prensa celebrada este martes, los sindicatos han resaltado que esta información debería generar una alerta generalizada. Han destacado que ya en 2021 se había identificado una tendencia preocupante debido al elevado número de trabajadores que perdieron la vida en accidentes de tráfico en Navarra. En concreto, la mitad de las muertes por accidente laboral ocurrieron en carretera, es decir, 10 de las 20 muertes registradas ese año.
Los sindicatos han subrayado que estas muertes se produjeron en diversas circunstancias, habiendo incluso casos provocados por una extrema precariedad, como el de un trabajador migrante que se dirigía en bicicleta a trabajar en Carcastillo en plena madrugada.
En Navarra, especialmente en los últimos años, las tasas de accidentes laborales se encuentran entre las más altas del país, y la cifra de trabajadores que fallecen en carretera también es preocupante.
Los sindicatos han argumentado que detrás de esta problemática existen factores determinantes, como la notable centralización de los servicios en la ciudad de Pamplona y la despoblación de los pueblos y valles debido a ciertas decisiones políticas. Asimismo, el elevado número de kilómetros que deben recorrer los trabajadores, la falta de consideración del desplazamiento como un riesgo relevante en la función pública, la falta de oportunidades para trabajar desde casa por parte de las empresas, la falta de consideración de los riesgos viales como riesgos laborales y la precariedad que lleva a los trabajadores a utilizar vehículos de baja calidad y un transporte público insuficiente y no adaptado a las necesidades de los trabajadores.
Ante estos riesgos, los sindicatos han exigido que las empresas elaboren planes de movilidad que incluyan una evaluación de riesgos específica y propongan medidas de prevención. Además, han enfatizado en la necesidad de garantizar la participación de los trabajadores en el desarrollo de estos planes.
Los sindicatos han criticado el hecho de que la actualización del real decreto RD231/2017 del gobierno de Mariano Rajoy haya negado el derecho de veto de los representantes sindicales en la implantación de los planes de movilidad. Según han señalado, muchas empresas implementan estos planes simplemente para obtener descuentos en las cotizaciones de contingencias profesionales, sin llevar a cabo las medidas recomendadas.
Ante esta situación, los sindicatos proponen diversas medidas para reducir la movilidad laboral, como el teletrabajo durante algunos días de la semana, la consideración de la distancia como un factor de riesgo en el empleo público y la asignación de plazas en consecuencia, y la descentralización geográfica.
También solicitan que todas las empresas elaboren planes de movilidad en colaboración con los delegados sindicales y el personal técnico del ISPLN, que las medidas de estos planes sean obligatorias y formen parte de la evaluación de riesgos, y que se ofrezcan ayudas para el uso del transporte público y para el mantenimiento de vehículos cuando no exista transporte público adecuado.
Asimismo, también piden una supervisión e inspección rigurosa de la implementación de estas medidas, mejoras en el transporte público y la mejora de ciertas carreteras.
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