
En Navarra, los datos turísticos del mes de julio reflejan un panorama alentador para el sector hotelero. Se contabilizaron 217.912 pernoctaciones, lo que representa un aumento del 5,5% en comparación con el mismo mes del año anterior, un indicio claro de la recuperación y el dinamismo del turismo en la región.
Las cifras muestran que, mientras las pernoctaciones de residentes se incrementaron un notable 8,1%, las de turistas no residentes experimentaron una ligera reducción del 0,2%. Esta tendencia revela la importancia del turismo interno, que sigue fortaleciendo la economía local.
En el acumulado de enero a julio, las pernoctaciones han crecido un 10,8%, lo que sugiere que Navarra se está convirtiendo en un destino cada vez más atractivo. La cantidad de viajeros que optaron por alojarse en la comunidad durante julio alcanzó las 106.982 personas, marcando un incremento del 1,6% en relación con el mismo mes del año pasado. La estancia media también ha aumentado, situándose en dos días, un 3,8% más que en julio de 2022.
Los turistas españoles constituyen el 65% de los visitantes, generando el 69,7% de las pernoctaciones. Dentro de este grupo, el turismo interno navarro representa un 7,5% de los viajeros y un 8,1% de las estancias. Los visitantes provenientes de otras comunidades, principalmente Madrid, Cataluña y el País Vasco, conforman un porcentaje significativo del turismo: el 19,4%, 17% y 12,5%, respectivamente.
Entre las pernoctaciones, los viajeros de Madrid, Cataluña y el País Vasco se destacan como los más numerosos, ocupando un 22,1%, 17% y 10% de las estancias totales. Esto resalta la conectividad y el interés que tiene Navarra para esos turistas.
La oferta hotelera en julio fue de 12.806 plazas distribuidas en 299 establecimientos, logrando un grado de ocupación del 53,5%, lo que supone un aumento de 0,9 puntos en comparación con el año anterior. Además, la industria hotelera ha generado empleo para 1.655 personas, un crecimiento del 4,4% respecto al mismo mes del año pasado, lo que impulsa la economía local y la creación de puestos de trabajo.
Sin embargo, a pesar del aumento en la ocupación, la facturación media por habitación ocupada fue de 109,5 euros, una disminución del 3,6%. En cuanto a los ingresos medios diarios por habitación disponible, se registraron 69,8 euros, un 0,7% menos que en julio de 2022. Esta dualidad en el crecimiento de ocupación y demanda podría ser un tema a explorar para mejorar la rentabilidad del sector.
A nivel nacional, el panorama también muestra un crecimiento moderado. En julio, las pernoctaciones aumentaron un 1,8%, mientras que en los primeros siete meses del año la cifra creció un 0,7%. Si bien la media de facturación por habitación ocupada es de 146,5 euros, el reto sigue siendo garantizar que este crecimiento se traduzca en beneficios sostenibles para todos los actores del turismo.
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.