El pasado lunes 13 de octubre, el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, abordó la reciente destitución del gerente del Ayuntamiento, Iñigo Anaut, quien dio positivo en un test de alcoholemia realizado por la Policía Municipal durante el fin de semana. Asiron subrayó que una de las distinciones entre las ideologías de izquierda y derecha radica en la capacidad de la izquierda para actuar como modelo de conducta.

Durante una rueda de prensa tras un evento oficial, Asiron afirmó: "Debemos ser ejemplares y, llegado el momento, ejemplarizantes". Esta declaración refuerza la posición de la administración local de tomar responsabilidades y actuar con firmeza ante situaciones que comprometen la integridad de la institución.

El alcalde relató que fue informado del incidente a primera hora de la mañana, alrededor de las 8:00, por el propio Anaut, quien se ofreció a renunciar a su puesto. “Actué de inmediato y, en una Junta de Gobierno convocada a las 9:00, se aprobó su cese. El proceso fue extremadamente rápido, menos de dos horas desde que me enteré de la situación”, destacó Asiron.

Añadió que Anaut le comunicó no solo los detalles del incidente, sino también su decisión de dejar el cargo por su propia voluntad. “Si bien el cese fue una orden mía, también hay que considerar las complejidades de estas relaciones. Por la mañana, él mismo me expresó que no veía viable su permanencia en el puesto”, concluyó el alcalde, enfatizando la necesidad de mantener estándares éticos en la administración pública.