En una reciente operación conjunta entre la Policía Municipal de Pamplona y la Policía Foral, se han realizado cruciales registros que han puesto al descubierto un presunto caso de tráfico de drogas y tenencia de armas en el barrio de Rochapea. En total, han sido arrestadas cuatro personas, dos hombres y dos mujeres, y se han descubierto 93 plantas de marihuana cultivadas de manera ilegal, junto con un arsenal impresionante de armas y una notable cantidad de dinero en efectivo.

Los hechos se produjeron el pasado jueves, 20 de marzo, cuando las autoridades llevaron a cabo los registros en dos residencias específicas en respuesta a las quejas de los vecinos. Estas alertas indicaban que en la calle Garde se sospechaba de actividad relacionada con la venta de drogas.

Con base en las denuncias, el Grupo de Investigación de la Policía Municipal activó un operativo que involucró a la Brigada de Proximidad y a agentes especializados. Simultáneamente, la Policía Foral ya había establecido vigilancia sobre las mismas propiedades debido a indicios previos de tráfico de sustancias ilegales.

Durante varios días de monitoreo, se identificó a múltiples individuos que entraban y salían del portal en cuestión. En varias ocasiones, estos individuos portaban dosis de drogas, lo que condujo a que los agentes levantaran actas de aprehensión de sustancias prohibidas. Posteriormente, la Policía Municipal presentó los hallazgos al Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona, solicitando la autorización necesaria para realizar los registros en los domicilios señalados.

El resultado del operativo fue contundente: se confiscó un total de 1.681 gramos de cogollos de marihuana, así como diversos utensilios asociados al cultivo y distribución de la droga, incluidas básculas y bolsitas. Además, se hallaron múltiples armas, entre ellas pistolas, machetes, municiones y otros objetos peligrosos, como bastones con puntas de acero. Tras la finalización de las diligencias, los detenidos —dos hombres de 35 y 34 años y dos mujeres de 40 y 33 años— quedaron a disposición del juzgado, donde se decidió su liberación provisional a la espera de nuevas instrucciones judiciales.