En un operativo reciente en Oricáin, dentro del municipio de Ezkabarte, la Policía Foral ha llevado a cabo la detención de un hombre de 32 años, con un preocupante historial penal, y una mujer de 26 años, quienes están siendo investigados por usurpación de propiedad y amenazas severas.

La intervención policial se desató tras recibir un aviso de los vecinos sobre la entrada no autorizada de individuos en un chalet local. Al llegar al lugar, los agentes encontraron a la mujer en el interior de la vivienda y al hombre preparado para escapar por el muro perimetral. En la escena también se localizó un vehículo en el que se encontraba una niña de apenas 11 años, generando una situación de máxima tensión.

Los detenidos no dudaron en confesar a la policía sus intenciones, explicando que habían elegido la vivienda a través de búsquedas en internet y que portaban herramientas que pretendían usar para cambiar las cerraduras. En un giro alarmante, los ocupantes, interceptados por vecinos durante el intento de usurpación, amenazaron a quienes dieron la voz de alerta, lo que quedó registrado en el informe policial posterior.

En otra acción policial en Fontellas, las autoridades detuvieron a dos hombres de 25 y 30 años, uno de los cuales poseía antecedentes penales por robos similares. La alarma se activó en una empresa de reciclaje, alertando al propietario de una posible entrada forzada. Este, prudentemente, siguió a los sospechosos en su furgoneta mientras notificaba a la Policía Foral.

Las fuerzas del orden lograron interceptar el vehículo, descubriendo una variedad de herramientas que podrían haber sido utilizadas para cortar cercas o alambradas. El propietario de la empresa pronto identificó ciertos objetos en poder de los individuos detenidos como suyos, lo que llevó a su arresto en el lugar y su posterior traslado a la comisaría.

En un incidente separado en Estella-Lizarra, un hombre de 48 años fue arrestado por robar en una casa de campo en Cirauqui y vandalizar el vehículo de la denunciante, un familiar. La conmoción se intensificó cuando se supo que el individuo había forzado la cerradura para cometer el robo y había dañado las ruedas del automóvil de la víctima, a quien además amenazó durante una discusión, lo que motivó que ella solicitara una orden de protección ante la Policía Foral.

Asimismo, durante las celebraciones en Tudela, un ciudadano denunció que se habían realizado varias transacciones no autorizadas en su tarjeta bancaria tras perder o sufrir el robo de su cartera. Al atender la denuncia, los agentes identificaron a un joven de 19 años en uno de los establecimientos, siendo detenido tras comprobarse su implicación en delitos menores de estafa por el uso fraudulento de una tarjeta ajena.