
El presidente del PNV en Navarra y también del Parlamento foral, Unai Hualde, ha criticado la "persecución política despiadada" que han llevado a cabo UPN y PP contra Manu Ayerdi, un exconsejero que ha estado bajo el peso de acusaciones infundadas. En una reciente declaración, Hualde destacó que el fallo de la Audiencia Provincial, que confirma el cierre del caso Davalor, libera a Ayerdi de una sombra que le ha seguido durante años.
En el marco de su intervención previa al pleno parlamentario, Hualde enfatizó que la decisión judicial no solo aclara la situación para Ayerdi, sino que también señala que no existen pruebas de delito en su actuar. Este desenlace, según el presidente del PNV, resalta el sufrimiento que ha significado para Ayerdi una situación de incertidumbre que duró más de cuatro años.
Respecto a la posibilidad de que Ayerdi regrese al gobierno, Hualde mencionó que, tras haberse separado de su cargo a causa de las acusaciones en 2021, ahora está en una fase diferente de su carrera y es él quien decidirá su futuro. Además, hizo hincapié en cómo estas situaciones pueden llevar a que figuras valiosas en la política se alejen de su vocación, creando un clima de miedo que no beneficia a la democracia.
El líder del PNV expresó su alivio por que se cierre este capítulo judicial que, en su opinión, ha sido alimentado por las acciones de sus adversarios políticos. Hualde denunció las "malas prácticas" de UPN y PP, quienes, según él, lanzaron acusaciones carentes de fundamento a lo largo de un proceso judicial que se ha prolongado durante una década.
Además, Hualde recordó que tanto la Cámara de Comptos como el mismo Parlamento habían investigado previamente el tema y no encontraron irregularidades, un hecho que, a su juicio, subraya la falta de justificación en la persecución inicial por parte de UPN y PP. Esta situación, de acuerdo con Hualde, llevó a Ayerdi a renunciar a su puesto en el gobierno tras la presión ejercida por las denuncias en su contra.
El presidente del Parlamento hizo un llamado a la reflexión para ambas formaciones políticas, señalando que UPN ha estado implicado en operaciones de capital de riesgo que han suscitado controversia en la comunidad. Este tipo de tácticas, según Hualde, no representan la forma adecuada de hacer política ni ayudan a contribuir a una democracia saludable.
Por último, Hualde abordó la polémica inversión de 2,6 millones de euros a la empresa Davalor, explicando que este tipo de decisiones son comunes en el ámbito del desarrollo regional. Subrayó que, aunque algunos proyectos puedan fracasar, es necesario asumir ciertos riesgos para promover el crecimiento y la innovación. En relación a Davalor, Hualde defendió su proceso como más sólido comparado con fallos previos en otras gestiones, desafiando así a sus oponentes a reconsiderar sus posiciones.
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.