Este domingo, Pamplona se convirtió en escenario de una intervención policial antes del icónico chupinazo que da inicio a las festividades de San Fermín. La Policía Nacional, en colaboración con la Policía Municipal, llevó a cabo una operación en la famosa cuesta de Santo Domingo, generando una atmósfera de incertidumbre justo antes del evento central.

El incidente tuvo lugar minutos antes de que sonara el tradicional cohete, en las cercanías de la entrada lateral del Ayuntamiento y a pocos pasos de la plaza de Santiago. La tensión era palpable mientras los agentes se movilizaban para controlar la situación, lo que llevó a la interrupción del tránsito en la conocida cuesta.

Los efectivos policiales, utilizando su equipo de intervención, realizaron una carga que resultó en la inmovilización de un individuo en el suelo, suscitando reacciones entre los presentes. A medida que las festividades se acercaban, la respuesta policial dejó muchas preguntas en el aire sobre la seguridad y el control durante uno de los momentos más esperados del año en la ciudad.

Las imágenes de la intervención se contraponen a la alegría generalmente asociada con el comienzo de los Sanfermines, lo que invita a una reflexión sobre el enfoque de las autoridades en la gestión de estas celebraciones populares y el equilibrio entre seguridad y el derecho de reunión.