
El pasado 6 de octubre, la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, unió fuerzas con Beatriz Corredor, presidenta de Redeia, en un evento significativo que marcó el inicio de las obras de la nueva línea eléctrica de 220 kV que conectará Tierra Estella y Muruarte. Este acto solemne, centrado en la colocación de la primera piedra, se llevó a cabo en la futura subestación de Oteiza.
El evento reunió a importantes figuras políticas y empresariales, como Alicia Echeverría, delegada del Gobierno en Navarra, Mikel Irujo, consejero de Industria y Transición Ecológica y Digital Empresarial, y Rubén Martínez Landa, alcalde de Oteiza, entre otros. Todos ellos subrayaron la relevancia de este proyecto para la región.
Con una inversión que supera los 25 millones de euros, esta infraestructura ha sido catalogada de interés foral por las autoridades navarras. Según Red Eléctrica, el objetivo es atender la demanda de empresas y asociaciones locales, mejorando la calidad del suministro eléctrico y, por ende, impulsando el crecimiento industrial y económico de la zona. La compañía enfatizó que este proyecto también representa una oportunidad para fortalecer la competitividad empresarial y atraer nuevas inversiones al territorio.
Corredor destacó la importancia de invertir en infraestructuras eléctricas en un momento crítico para el desarrollo industrial tanto en Europa como en España. Además, reafirmó el compromiso de Red Eléctrica con Navarra, enfatizando la necesidad de proporcionar las capacidades necesarias para hacer de esta región un nuevo centro de atracción para inversores.
Por su parte, María Chivite consideró que la nueva línea eléctrica y la subestación en Oteiza pondrán fin a una histórica falta de infraestructura energética en Tierra Estella. Señaló que, como la comunidad más industrializada de España, Navarra debe contar con la red eléctrica adecuada para liderar la transición hacia una economía más sostenible y para poder acoger nuevos proyectos industriales que demandan gran consumo energético.
El presidente de Laseme, Carlos Ros, también celebró el inicio de las obras, afirmando que la subestación no solo aborda un déficit energético histórico, sino que representa una oportunidad sin precedentes para la reindustrialización de la comarca en el contexto actual.
La nueva línea eléctrica, que se extenderá por 30 kilómetros desde la subestación de Oteiza hasta Muruarte, ha sido diseñada a través de un proceso participativo que priorizó aspectos técnicos, sociales y medioambientales. Red Eléctrica aseguró que el trazado ha sido optimizado para minimizar su impacto y adaptarse a las necesidades del entorno.
Además, esta infraestructura permitirá la integración de nuevos proyectos de energía renovable en una región con un alto potencial eólico, de acuerdo con el Plan Energético de Navarra. La conexión con el nuevo eje de 400 kV Navarra-País Vasco, que también está en desarrollo, fortalecerá la red eléctrica y facilitará la interconexión con Francia a través del Golfo de Bizkaia, mejorando así la capacidad del sistema para integrar energías renovables.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.